Falsos dioses

La verdad es una especie en retirada,
un intento de calmar la búsqueda urgente,
de la evasión de los satisfechos,
que son pero están ausentes.

Si me dijeran inventa una palabra,
hay días que no sabría
si dar un aliento contra tanta desesperanza,
o mirar lo pequeña que hemos hecho la alegría.

Falsos dioses,
que sólo sois la mitad de la verdad.
Si no sirviérais al tener,
al acumular,
otro mundo posible
no sería de extrañar.

La ciencia inventa el futuro,
más yo veo que es hija nuestra y no madre,
no es un ídolo aunque si una apuesta,
hermana maestra más no adorable.

Así las cosas, más allá de mí mismo,
enfrente de tanta elección,
elijo elegir estar vivo,
ya que debajo de todo, todo es repetición.

Falsos dioses,
que sólo sois la mitad de la verdad.
Si no sirviérais al tener,
al acumular,
otro mundo posible
no sería de extrañar.

Después de la modernidad nos dejaron
fragmentos de un insípido olor a novedades,
caricias de un tiempo de solos,
de apariencias sin ternura y soledades.

Ahora es el todo y todo es ahora,
y mientras se extinguen las rosas,
se extiende la confusión como la noche,
y el egoísmo va de boca en boca.

Falsos dioses,
que sólo sois la mitad de la verdad.
Si no sirviérais al tener,
al acumular,
otro mundo posible
no sería de extrañar.
Falsos dioses,
que sólo sois la mitad de la verdad.
Si no sirviérais al tener,
al acumular,
otro mundo posible
no sería de extrañar.

Texto: Antonio Caballero
Texto: Álvaro García